martes, 23 de noviembre de 2010

anger

Ayer, como ya te dije, estuve hablando con el señor Verga. Pues bien, cuando me aburrí, me piré, pero dejé el tuenti abierto porque iba a tocar el piano un rato pero luego volvía. Pues después de diez incansables minutos con el tercer movimiento de esa sonata de Beethoven, me puse a coger el ordenador y veo que está apagado y sobre la mesa de mi mamá. Entonces voy a la cocina, en la que mi mamá está cocinando la cena (tortilla) y me dice: ¿quién era Jose? y yo: ¿eh? y dice mi hermana Luzifer: sí, sí, Dido, Jose, ése con quien estabas hablando, y me fui de ahí lo más rápido posible. Si hubieses leído la conversación, habrías entendido el porqué.
Bueno, resumiendo lo de hoy: en química jugamos a paella otra vez, y fue muy, muy gracioso. Luego había biología, y luego educación física, y jugamos al baloncesto pero desgraciadamente ganó Górriz porque es imparable. Luego había recreo, en el que me llegó un olor a castaña chamuscada por el área derechil. Luego había cmc, y jugamos otra vez a paella, y como la profe no se empana, nos levantábamos en su maldita cara y ella nada, sólo nos miraba raro pero no sabía lo que hacíamos. Luego tuve dibujo, y por fin lavé la escuadra y el cartabón, porque me estaban dejando la lámina hecha un asquete, y salía hasta tinta de rotulador de cuando mis padres las utilizaban, allá por sus años mozos. Luego tuvimos mates, y jugamos un rato a paella, pero nada, no mucho, se me hizo realmente eterno porque no sé qué de trigonometría y no sé qué, pero lo mejor fue cuando dice la Nani, que se quedó pensando en una palabra que no le salía (esquema): es que a veces no me salen las palabras y me da mucho miedo. Oír a una señora que algo le da miedo, y sobre todo, esa estupidez, es muy, muy cómico. Bueno. Luego teníamos lengua, y como la Montero siempre tarda la tira en venir, pues estuvimos haciendo tapón en la puerta, como siempre, pero algún burro (Mateo) se la cargó, se desencajó de las bisagras y precisamente la Montero llegaba en cinco, cuatro, tres, dos, uno, así que se quedó con ella en la mano.
Luego, a la salida, fui hasta casa de mi abuelita con Elena/Preciosa/Rosa. Elena me demostró su amor hacia mí unas cuantas, cuántas veces, pero me encanta, porque me sube la moral hasta el Everest. Cuando nuestros caminos se separaron, seguí por la calle de mi abuela, y miré casualmente hacia el escaparate de un bar, y adivina a quién vi: a Rubén, mi profe de historia de hace dos años, el Ojo Virolo, me hizo tanta gracia... Comí rollitos de primavera (mis favoritos) y un caqui. Luego fui caminando hasta el conservatorio, y por el camino vi a mi profe de mates de segundo, el que se metía el boli en la nariz, en la oreja y luego nos daba con él en la cabeza para que prestásemos atención. Pero se me estaba acabando la batería del iPod, lo cual fue un maldito calvario, y cuando llegué sólo quedaban cinco minutos, así que fui a la biblioteca y allí me encontré con Coche Hombres, subimos a clase, improvisé cuatro acordes mal puestos, me dijo que estaba perfecto, y nada, de panchu, luego me rereuní con Coche Hombres (ya sé que puse re dos veces, pero es que como nos habíamos reunido antes, pues otra vez), la acompañé un rato, y luego fui a informática, en la que pasaron dos cosas importantes (o tres, no sé):
1. Parece ser que después de dos meses, la clase no es tan individualista como antes, porque mientras el profe repartía las partituras de la ópera, mantuve una conversación no muy larga con el tipo llamado Pepe Luis/Alejandro, y luego con el de la Cara Chupada, o Chupi. Por fin prosperan las cosas en esa clase de mierda.
2. Pepe Luis/Alejandro tenía la música a tope, y adivina qué estaba escuchando: MELENDI. No puede ser. Mi mundo se cayó en pedazos. Fue horrible.
3. Como mi iPod se había quedado sin batería, pues me puse a escuchar música del youtube, conciertos de The Kooks en directo. Y parecía que a Chupi le gustaba.
Luego fui a inglés, y Paul me estuvo dando la tabarra con no sé qué de economía y cartas que predecían el futuro o no sé qué y me aburrí tanto que casi me duermo allí delante.
Después nada, tiré pa casina, y mi padre mañana se va a dar una conferencia a Madrid y esta noche se va con sus amigotes a ver una peli al festival de Gijón, así que no lo veré hasta el jueves (toma, pero jo). Y nada, eso, ya me cargó el Farmville así que taluego.

2 comentarios:

  1. jajajajajajaja lo primero, me encanta la mencion de Luzifer jajajaja
    2.buenisimo lo de "me llegó un olor a castaña chamuscada por el área derechil"
    3."vi a mi profe de mates de segundo, el que se metía el boli en la nariz, en la oreja y luego nos daba con él en la cabeza para que prestásemos atención"te juro que no em puedo para de reir jajajaja
    por cierto, como ultima anotacion, PROFUNDISIMA despedida jajajaja

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  2. jajajajajajaja lo sé... es gracioso, ¿no es cierto? a mí también me hace gracia cuando lo escribo jajajaja

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